Cada día nacen proyectos innovadores al servicio del medio ambiente. Los proyectos de innovación ecológica pueden orientarse a:
- Productos con los que están asociados bienes y servicios;
- Procesos, aquí hablamos de procesos o medios de fabricación;
- Estrategias de marketing;
- Instituciones, que involucran al ámbito social en su conjunto.
Muy a menudo, la innovación ecológica orientada a productos y procesos productivos favorece el desarrollo tecnológico, mientras que cuando se centra en el marketing, la innovación ecológica promueve aún más cambios.
Debido a la huella ambiental de la construcción, o a la gestión de los residuos de las obras, el sector de la construcción es uno de los más contaminantes. Según ADEME, el sector de la construcción es el que más energía consume de todos los sectores económicos, el equivalente a 70 millones de toneladas de petróleo (el 43% de la energía final total). De hecho, el consumo medio anual del sector de la construcción se acerca a los 400 kWh de energía primaria por m² calentado. Por tanto, no sorprende que uno de los objetivos del gobierno sea erradicar las viviendas que consumen mucha energía de aquí a 2050. La innovación ecológica tiene mucho que aportar al sector de la construcción: nuevos materiales y aislantes, mejores prestaciones térmicas, hábitat modular , mejor gestión de los recursos y desperdicio... ¡Pero aún queda mucho trabajo por hacer!
El nacimiento de Valoops surge de esta observación sobre la utilidad de poner la innovación al servicio de la ecología. Hemos optado por imaginar y fabricar productos innovadores en su composición pero que cumplan con los mismos requisitos técnicos que los productos tradicionales. De esta manera, estamos orgullosos de ser parte de innovaciones que tienen como objetivo respetar el planeta y mejorar nuestra calidad de vida.
